TELDE TIENE UN RECONOCIMIENTO PENDIENTE CON PEDRO CRUZ SOCORRO
Perico cumplió hace unos días 84 años «limpiando» pescado y pidiendo un reconocimiento institucional a Manolo Oliva y Antonio Gómez. Aunque el reconocimiento institucional pendiente de Telde es con el histórico líder vecinal de Melenara y empresario emprendedor Pedro Cruz Socorro que cumplió el pasado martes día 22 de agosto 84 años, lleno de vitalidad y salud «limpiando» pescado en el Restaurante Perico Junior de su hijo Cristo en Playa del Hombre.
Perico trabaja desde niño en múltiples labores y ha cotizado 57 años a la Seguridad Social. Incluso tuvo tiempo de estar en el paro y en Venezuela. ONDA Perico, ha sido el único empresario teldense distinguido por el Gobierno de España (año 2008) con la Medalla de Oro al mérito en el Trabajo.
A Pedro Cruz, Perico para todos, no hay nada que le aparte del tajo: ni sus 84 años ni la Medalla al Mérito en el Trabajo que el Gobierno central le otorgó en consejo de Ministros.
Perico tiene una amplia trayectoria social, vecinal y empresarial desde los inicios del movimiento asambleario en Telde en 1970, hasta su penúltima etapa profesional en el famoso restaurante Casa Perico, donde trabajaba con una gran familia de 27 personas, 12 mujeres, un restaurante emblemático donde llegó a vender 500 cajas de vino Torres al año, (cada caja tiene 12 botellas).
Pedro Cruz es una institución en Melenara, pero antes que nada aclara que la Medalla no se la han otorgado únicamente por su labor en el restaurante Casa Perico, sino por toda una trayectoria laboral. «Empecé con siete u ocho años y he tenido por lo menos diez trabajos distintos; creo que el mérito está en que siempre he querido mejorar y renovarme», confiesa mientras limpia unos pescados en la cocina de su negocio. Nació en Melenara el 22 de agosto de 1939, recién acabada la Guerra Civil, el quinto de ocho hermanos de «un barquero sin barco». Como a casi todos los niños de su generación, la miseria le obligó a agudizar el ingenio y a trabajar en todo lo que iba saliendo.
«Siempre me guió la idea de que mis hijos no pasaran por lo que yo pasé», señala antes de enumerar sus numerosos empleos en esos 60 años, 57 de ellos cotizados a la Seguridad Social como asalariado y como trabajador autónomo. Agricultor, recadero, cobrador, soldador, encargado de fábrica, tendero, vendedor ambulante y otra vez tendero. Hasta que en 1985 abrió el restaurante Casa Perico.Y aún tuvo tiempo de estar 18 meses en el paro y otros cinco meses en Venezuela como jefe de obra de una empresa sueca.
Perico es un empresario resiliente con una vida de trabajo y sacrificio, desde soldador a cobrador de las guaguas de Melenara, a empresario emprendedor.
Melenara reivindica un reconocimiento pendiente de tres instituciones en el barrio: Pedro Cruz Socorro, Antonio Gómez y Manolo Oliva.
Feliz cumpleaños, salud y larga vida, amigo Perico.
(*) Manuel Ramón Santana director de Telde Libre es profesor especialista en Educación Especial por la Universidad de Burgos.
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